- El PSOE de Alcalá denuncia la falta de diálogo y la improvisación del Gobierno local: “Es una decisión impuesta que perjudica al barrio, a los vecinos y al entorno del arroyo Camarmilla”
Alcalá de Henares, 6 de octubre de 2025. El Grupo Municipal Socialista denuncia la decisión unilateral de la alcaldesa Judith Piquet de trasladar el tradicional mercadillo de los martes a una nueva ubicación, sin contar en ningún momento con los vecinos, ni con los comerciantes afectados.
El mercadillo de los martes, que cuenta con una gran tradición y es punto de encuentro para cientos de vecinos cada semana, perdería su actual emplazamiento por decisión del Gobierno local de PP y VOX, que pretende moverlo a una zona junto al arroyo Camarmilla. “Es una medida impuesta, tomada sin diálogo ni participación vecinal, y que demuestra el estilo autoritario de Judith Piquet”, denuncian desde el PSOE de Alcalá.
Los socialistas advierten de que la medida supondría la eliminación de unas 150 plazas de aparcamiento cada martes, afectando directamente a los residentes y a los comercios del entorno. “Durante la noche del lunes y todo el martes los vecinos perderían su posibilidad de aparcar en su propio barrio, obligándolos a desplazarse a otras zonas ya saturadas”, explican.
Los socialistas recuerdan que en el pasado pleno de junio presentaron una propuesta en la Junta Municipal de Distrito III para destinar ese espacio a un gran parque infantil con zonas de sombra, juegos inclusivos y áreas de descanso, siguiendo el modelo de la plaza de San Lucas. “Ese es el modelo que defendemos: espacios verdes, accesibles y participativos, no decisiones improvisadas que crean problemas donde no los había”, afirman.
El PSOE de Alcalá exige al Gobierno de PP y VOX y a la alcaldesa Judith Piquet que paralicen de inmediato cualquier plan de traslado del mercadillo sin el aval de los vecinos y que reconsideren su decisión de eliminar 150 plazas de aparcamiento semanales.
“Una vez más, Piquet gobierna de espaldas a la ciudadanía, imponiendo sus decisiones sin escuchar a nadie. Los barrios de Alcalá no necesitan ni más imposiciones ni más fotos, sino gestión, diálogo y respeto a los vecinos y vecinas”, concluyen los socialistas.




